Este viernes en el estadio Parc des Princes en Paris, La vigente campeona, Estados Unidos se mide ante Francia, en un inédito choque de gladiadoras en busca de su pase a las semifinales de la Copa Mundial de Fútbol Femenino.
Ambas selecciones nunca se han cruzado en esta competición y será la primera vez para el conjunto de las barras y las estrellas se enfrente a la anfitriona del torneo, en busca de una final para defender de su trono en el balompié femenino.
El equipo estadounidense es el claro favorito en la competición, no solo ha llegado a cuatro finales de la copa, sino que la ha ganado en tres ocasiones: 1991, 1999 y 2015. Asimismo tiene en su anuar deportivo cuatro medallas olímpicas y en la última década solo las japonesas pudieron quitarle el reinado y fue en el 2011, cuando las niponas les ganaron en la final 3-1 en tanda de penaltis.
Para este edición, el conjunto norteamericano llega sin varias de las estrellas con las que se coronaron en el 2015, entre ellas la portero, Hope Solo y la máxima goleadora en la historia de la selección, Abby Wambach, no obstante, el equipo mantiene su esencia con un plantel sólido para retener la corona.
El combinado de Estados Unidos empezó con una arrolladora victoria 13-0 ante una amateur Tailandia, en la que su estrella, Alex Morgan marcó cinco goles. Luego derrotaron 3-0 a Chile y cerraron con el triunfo 2-0 ante Suecia para liderar el Grupo F. En octavos de final sufrieron para vencer 2-1 a España, con dos penaltis, definidos por su capitana y pilar fuerte del equipo, Megan Rapinoe. Las vigentes campeonas también cuentan con la brillantez y sagacidad de la mediocampista ofensiva Rose Lavelle y la delantera extrema Tobien Heath, así como la atacante, Carli Lloyd que lleva tres anotaciones en esta edición.
Sin embargo, el conjunto al mando de Jill Ellis se enfrenta un rival distinto que ha impuesto su poderío desde la primera fase. Luego de la goleada propinada a Tailandia, la selección logró otros tres triunfos, pero con menos dominio, al igual que Morgan, quien que ha sido cambiada en la segunda parte para que Lloyd le agregue más efectividad en los ataques.
Ante las españolas, el equipo bajo la capitanía de Rapinoe, no logró marcarle a su rival a balón en juego, solo por la vía del penalti encontró la portería, con una falta dudosa que la árbitro pitó sobre Lavelle. Aunque el equipo sigue siendo favorito para ganar la competencia, tendrá de frente a una Francia que como locales y con casa llena se crece totalmente, pues así lo ha demostrado en toda la competencia.
Francia ocupa el tercer lugar del ranking femenino de FIFA y en este torneo ha llegado a semifinales de la copa en el 2015. A pesar que la directora técnica del seleccionado francés, Corinne Diacre, admitió que el equipo aún no está al 100 por ciento, lo cierto es que el combinado Les Bleus llegan invictas hasta los cuartos de final. En el partido inaugural ganaron 4-0 a RP de Corea, luego vencieron 2-1 a Noruega y 1-0 a Nigeria para clasificar a octavos en la que vencieron en extra tiempo 2-1 a  Brasil.
Enfrentar a Estados Unidos por el pase a semifinales es un reto complicado, pero el equipo cuenta con jugadoras con experiencia y calidad, que militan en las ligas más importante de Europa. La mediapunta Amadine Henry y la delantera Euginie Le Sommer, juegan para el Olympique de Lyon, campeonas de la Champions League femenina. Ambas son dos de las mejores atacantes de la copa, esta dupla ofensiva acumula dos goles cada una, en este torneo.
La destreza de Valérie Guavin con dos anotaciones y la fortaleza y seguridad que transmite la defensa, Wendy Renard, quien también suele ser letal en ataques aéreos, y que ha marcado tres goles, son algunos de los elementos más fuertes de las Blues.
Diacre tiene al servicio un equipo con grandes posibilidades de darle una fuerte batalla a las estadounidenses. Eliminar a las actuales campeonas es un gran reto y al parecer para el conjunto Les Bleus nada es imposible.