Hace ya algunos años que no escribimos carta al Niño Dios, quizá es porque pensamos que habíamos conseguido dar algunos pasitos importantes y que pedir más era una muestra de avaricia. Pero el 2023 podría ser un año intenso y enormemente beneficioso para nuestro empequeñecido fútbol así que decidimos gastar un poquito de tinta y presentar una modesta lista de solicitudes que aquí les va:
1. Menos Figureo y Más Trabajo
Te pedimos menos figureo de parte de Marco Antonio Figueroa. Es verdad que está bien la exposición mediática, las fotitos mostrando la vida gourmet que un frondoso pago le permite, la degustación de habanos de calidad y el trago caro del que se presume. No nos molesta que se auto denomine un amplio conocedor del fútbol champagne con sus constantes comentarios sobre la liga de Chile y la mexicana, sus análisis de Copa del Mundo y de la Premier League. Pero ¿sería mucho pedirte una que otra aparición a un estadio nacional para poder ver a los jugadores locales
El Fantasma hace gala de su mote y sus apariciones en los partidos de liga primera parecen actividad paranormal. Quizá sea posible que el chileno se muestre más y que sea más cercano y visible a una afición ávida de esa cercanía.
2. Que Se Acaben Los Inventos
Hablando sobre el seleccionador, ¿sería posible que se acaben los inventos? Nos gustaría aclarar que estamos agradecidos por el fogueo de alta calidad que nos dejó el 2022. ¡Gracias por eso! Pero ya no podemos vivir bajo el amparo de aceptar derrotas porque “jugamos contra mejores equipos”. Te pedimos que el Fantasma deje de inventar y que llame a lo mejor que tenemos disponibles.
Los partidos contra San Vicente y Las Granadinas y contra Trinidad y Tobago requerirán a nuestros mejores exponentes y no a los que alimentan el, ya agrandado, ego del seleccionador. Te rogamos que el chileno deje de inventar y se ponga a trabajar.
3. Una Verdadera Inteligencia Deportiva
Te pedimos a un seleccionador que pueda abrir sus ojos y que se aleje de la lamentable frase que afirma que “prefiere a jugadores jugando en Nicaragua que en otras ligas que no puede ver”. Cuando el chileno y su equipo de trabajo llegaron, lo hicieron bajo una cortina gigante de humo y prometieron niveles nunca antes vistos de inteligencia deportiva.
La verdad es que, hasta el momento, se han limitado a llamar a la Selección Nacional a jugadores que ya conocíamos o que estaban en el radar de Juan Vita o Henry Duarte. Pero Figueroa y su equipo de trabajo han fallado en el escauteo o en el seguimiento a jugadores que puedan aportar al crecimiento de la Azul y Blanco como Jacob Montes, Elio Castro o Freddy Ortiz o en el acercamiento con posibles legionarios como Pascal Lunqvist en Suecia y muchos otros jugadores en Costa Rica.
4. Que Los Legionarios Se Establezcan
El 2022 fue un año de olvido para los legionarios nicas y eso, sin lugar a dudas, afectó directamente el funcionamiento de la Selección. Francisco Flores, Douglas Forvis y Byron Bonilla terminaron por regresar a Nicaragua después de no conseguir solidificarse en suelo tico, Jason Ingram fue condenado al banquillo por Juan Vita en Guanacasteca y exiliado de la Azul y Blanco por los complejos y egos de un cuerpo técnico particular, Jaime Moreno no pudo lucir en Paraguay con un equipo condenado al descenso, Juan Barrera no pudo pesar en Guastatoya, Mathías Belli lidió con lesiones en el ascenso noruego y Henry Niño fue víctima de la falta de estabilidad en el Chalatenango de El Salvador.
En 2023 esperamos que Jaime logre dar un salto en Finlandia, que Renato encuentre equipo en Islandia, que Bryan López brille en Sporting de Costa Rica y que los goles sigan acompañando a Ariagner Smith en Lituania o donde vaya. Esperemos que a Waldner le vaya bien con Puntarenas.
Pero también esperamos que los jóvenes puedan encontrar puertas abiertas con un producto de exportación atractivo en Harold Medina, Keylon Batiz, Oscar Soto, Widman Talavera, Dylan Pineda, Joel Soto, Francisco Vallecillo, César Salandía y otros que pueden dar el salto.

5. Que El Fútbol Femenino No Se Estanque
El crecimiento es evidente, pero falta consolidación. El fútbol femenino tuvo un año bueno aunque no pudo dar la sorpresa frente a Trinidad y Tobago en un partido peleado. Bajo el liderazgo de Dalila López y, la posible continuidad de Elna Dixon, el fútbol femenino necesita atención y seguimiento. Sheyla y Yessenia han tenido un buen año con el Saprissa en Costa Rica, Yorcelly Humphreys es una realidad en el fútbol turco y Jaclyn Gilday podría buscar una oportunidad en el fútbol europeo.
Pero también es importante solidificar el proceso de la Sub-15 que levantó un título regional y que cuenta con grandes exponentes como Jennifer Sarantes o Stella Villalta.
6. Pedimos Lo Mismo Para El Fútsal
La gran sorpresa del año la dio el equipo nacional de fútsal en categoría Sub-20 que se quedó con el campeonato de la CONCACAF al derrotar a Costa Rica. La disciplina, sin lugar a dudas, ha logrado calar en todos los sectores de la sociedad nacional y requiere, igual que el fútbol femenino, de infraestructura, inversión y seguimiento.
7. Que Se Acaben Los “Bisnes” Y Los Dobles Sombreros
Finalmente te pedimos que se acaben los bisnes y los dobles sombreros. Que Luis Rosas se decida como director de Liga Primera o como secretario de Javier Salinas en el proyecto de la Selección Nacional. Ese doble sombrero ha perjudicado la realización de la Primera División y ha atentado contra equipos como el Municipal Jalapa, CD Ocotal y Juventus.
Exelente comentario, es nuestra realidad en el,futbol nacional , hay talentos en los departamentos, pero mejor se dedican a buscar extranjeros. No hay relevo generacional.