La Universidad dejó escapar dos puntos tras empatar a un gol frente a Diriangén en un partido que pudo haber dejado a los estudiantes con el camino abierto para pelear por ese ansiado segundo puesto rumbo a Liga de Campeones de CONCACAF. La UNAN ha rencontrado el hambre y las ganas de jugar al fútbol que se habían extraviado, la llegada de Daniel García ha impregnado al Alma Mater de un juego vistoso y dinámico que resulta atractivo y que agrada, aun cuando le hace falta para terminar de convencer.
Diriangén por su parte vive un día a la vez y basándose en esa filosofía de vida ha tenido que sufrir altas y bajas y su visita a Managua fue uno de esos días donde solo el destino se coloca de tu parte para poder conseguir resultados medianamente positivos.
La Universidad fue amplia dominadora del enfrentamiento y tuvo una primera parte donde fue superior sin lugar a dudas a un Diriangén que atacó muy poco y que encontró un inmerecido premio en una inexplicable jugada del paraguayo Ever Benítez. La primera en el partido la tuvo Diriangén en un mano a mano que no pudo definir Luis Fernando Coronel ante la excelente salida de Roger Sánchez que envió a la esquina con sus piernas al 9’.
La UNAN se fue apropiando y poco a poco fue anulando a su rival, al 15’ el zurdo Mike Cruz tomó una pelota cerca del área diriambina y sacó un violento disparo que fue atajado por el colombiano José Miguel Estrada que desvió la pelota. Los capitalinos volvieron a generar peligro al 19’ tras un centro de Henry García que fue rematado por la cabeza de Raúl Leguías que no supo definir y mandó la pelota por fuera.
Pero el fútbol da revanchas y Raúl Leguías se encontró con la suya al 31’ cuando recibió una pelota en el borde del área desde la pierna de Maykel Montiel y remató de pierna izquierda para marcar el 1-0. Pero la alegría no duró mucho en el banquillo universitario, los Caciques buscaron el empate para mantenerse en la lucha por el torneo internacional y trataron de ir hacia adelante, al 38’ Luis Fernando Coronel se encontró con una pelota tras un inexplicable fallo de Rodrigo Hernández que se mostró indigno de su equipo, el delantero encaró a Roger Sánchez que salió con tanta desesperación que se pasó llevando a Coronel. Dio la impresión de que Rodolfo Paiz había señalado la infracción que debió culminar con la expulsión del arquero granadino y todos se detuvieron, todos menos la pelota y Ever Benítez, el zaguero paraguayo asumió (como todos) que el partido se había detenido y lanzó la pelota dentro de su portería para, segundos después, llevarse la sorpresa al entender que Paiz había marcado gol en contra de la UNAN y a favor de Diriangén.
En la segunda parte la Universidad mantuvo su superioridad y apostó a la velocidad de sus juveniles para volver a colocarse adelante en el marcador. El ingreso de Cristian Flores fue importante, pero Jeyser Cisneros no pesó en quince minutos como lo hizo frente al Real Estelí. Diriangén se replegó y aspiró a hacer daño jugando al contragolpe, y estuvo a punto de encontrar petróleo al 58’ y al 63’ cuando Félix Rodríguez estuvo a punto de marcar un nuevo autogol en ambas ocasiones. Fue justamente Rodríguez de lo más flojo que presentó la UNAN que deberá abrir los ojos urgentemente en el mercado de pases buscando un lateral izquierdo.
La mejor del complemento la tuvo la Universidad al 77’ cuando Cristian Flores quedó frente a frente con Estrada, pero el meta colombiano que defiende a Diriangén ganó el mano a mano. Al final, un punto que resulta amargo para la UNAN que parece haber dejado perder dos unidades y que sabe dulce para un Diriangén que parece haber salvado uno.